
La reunión fue en algún restaurante de mariscos de la ciudad, un timón delata el lugar en la foto que se tomaron para el recuerdo. A la derecha del presidente municipal Cruz Pérez Cuéllar se ubica una pareja formada por un hombre con camisa roja y una mujer de blusa rosa, ambos con lentes; a la izquierda otro hombre con playera y gorra negra clava su mirada al fotógrafo.
El alcalde posa al centro de la foto mostrando una camisa negra con logotipos del negocio que recibió de obsequio.
La imagen captada parece la clásica foto de los políticos con sus simpatizantes. En este caso no se sabe. Hay más interacción y el obsequio entregado a Pérez Cuéllar pudiera inferir que hay alguna liga, mínimo de amistad entre los que aparecen en la imagen.
La foto es anónima, circula en redes sociales y fue publicada por uno de los misteriosos acompañantes del alcalde. Nada se sabía de ellos a no ser por otra imagen fotográfica que la Secretaría de Seguridad Pública Municipal que dirige César Omar Muñoz difundió el 23 de diciembre pasado, para informar sobre la captura de una pareja con un arma larga, que resultaron ser el matrimonio acompañante de Cruz en la foto.
El arresto se derivó luego de que llamaron la atención por viajar a exceso de velocidad en un auto Ford Fusión, por calles de la Zona Centro donde según la Policía Municipal, pusieron en riesgo a los peatones y a dos niñas de 8 y 10 años que viajaban con ellos.
Al ser alcanzados en la calle Galeana y Quintana Roo, los agentes encontraron en el interior del vehículo un fusil de asalto calibre .223 con un cargador desabastecido.
En el lugar los agentes no se las pasaron, ni perdonaron. No hubo paro. Seguramente el alto mando de la municipal acostumbrado a entrarle a los balazos, tampoco les creyó su cercanía con el alcalde porque la misma corporación los quemó en todos los medios de comunicación. Los elementos que hicieron el arresto seguramente deberían ser premiados el jueves 2 de enero en sesión de Cabildo por el mismo alcalde Cruz Pérez Cuéllar. No los dejaron ir.
Los detenidos fueron identificados como Emilio A., de 41 años, y Alejandra S., de 36, ambos turnados al Ministerio Público por su presunta responsabilidad en delitos contra la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos y las menores a Trabajo Social. Antes, les tomaron otra foto para el recuerdo. Ahora posando con chalecos naranjas. Así la difundieron.
Del tercer acompañante en la primera foto del restaurante, poco se sabe. En las filas de la municipal dicen que uno de ellos es El Financiero, dedicado también a la venta de armas para la maña. No sé puede asegurar esa versión. Lo que sí se puede señalar es que quedará en el misterio. Nadie lo investigará y el alcalde es probable que ni lo comente. A lo mucho su defensor de oficio que recibe con los brazos abiertos a los que van a llorar con Cabada lo haga por él. Ayer lo hizo en el mismo periódico que hizo articulista a Daniel Pando dónde pidió no politizar el tema de seguridad. ¡Así las cosas!