
Son más de 3 los morenistas caídos a los que después de haber apoyado el marketing para crear la burbuja del Crucismo, les dieron las gracias y ahora viven en el error, fuera del presupuesto.
De los más recientes caídos, el alcalde Cruz Pérez Cuéllar habló ayer de rescatarlos y darles un huesito en algún lugar del aparato burocrático municipal hoy ocupado en su mayoría por priístas, expriistas y ex panistas y hasta uno que otro arrimadijo.
Se trata de Karen Mora, quien dirigía la coordinadora de Atención Ciudadana del Suroriente quien fue sustituida por el priísta Víctor Valencia, hoy con credencial nueva de Morena. Karen con su carácter fuerte imponía la disciplina, pero también le generaba uno que otro diferendo, sobre todo con la gente que nada de muertitos y no trabaja.
Otro de los que cayeron es Raúl Fajardo, quien dirigía el Instituto Municipal de la Juventud y quién cumplir 30 años, no pudo seguir. Lo cierto es que no hizo nada en la pasada administración. El Instituto sólo tiene presupuesto de 3 millones para la nómina de los fósiles que ahí anidan y que también hay que decirlo, se llevan el premio a la pereza entre todos los institutos y dependencias de toda la administración municipal, hasta la del Estado y Federación. De plano, nada de creatividad para echar andar ese bodrio. Lo bueno que la edad es el límite para que se vayan a dormir a otro lado.
El tercer morenista caído es Andrés Domínguez Alderete, su turbia historia con la casa de cambio de El Chamizal es pública. Está en la charola de plata. No ha ido a prisión porque El Bayo Valenzuela tolera la corrupción en Juaritos y no atrapa ni un triste charal. Hasta parece que el Crucismo ya le untó las manos.
Hay morenistas caídos en todas las áreas como la doctora Gabriela Cisneros que estuvo en Centro Comunitarios; también hay que decirlo, algunos por cuenta propia dejaron el barco por congruencia y por no prestarse a la transa. Tal es el caso de Valeria Aguirre que tenía a su cargo Transparencia. Los demás han sido parte de la burocracia pero ya no están ni en las filas del crucismo. Hoy aparecen entre los cuadros de Andrea Chávez, Juan Carlos Loera e incluso, algunos apoyando al Pan y en la agrupación Los de Abajo. Recuerden que en el 2024 hubo alrededor de 120 mil votos cruzados de ciudadanía que votaron por todos los candidatos de Morena, pero no por Cruz Pérez Cuéllar.