
El escultor Enrique Carbajal mejor conocido en el mundo artístico como Sebastián y más por haber construido la monumental Equis, regresó una vez más a Juaritos, la ciudad que le tiene prácticamente una renta vitalicia de 4 millones de pesos por pintar esa escultura cada que se necesita.
Quiere más marmaja y se frota las manos cada que visita la frontera y para eso se le ocurrió proponer otra mega escultura en el Parque Suroriente de la ciudad.
Ya antes el Municipio le había bateado una mega escultura de jirafa que estaba proponiendo cuando murió Modesto en el Parque Central, pero ahora las cosas son distintas. Hasta fue recibido por el alcalde Cruz Pérez Cuéllar adicto a despilfarrar el dinero de los juarenses por todo el estado y quizás hasta la capital del país.
El rollo que tiró Crucito para avalar la propuesta de Sebastián, para comprar otra escultura igual a la Equis que tuvo en su momento un costo de 81.7 millones, fue fortalecer la identidad cultural de los juarenses.
Todo indica que hubo algún acuerdo, aunque no formal porque recordaron aquella oposición que tuvo la Equis adquirida por Teto Murguía y después la aceptación. Sólo que Cruz no es Teto, tiene un escenario diferente y una ciudad con mayores prioridades en materia de infraestructura, seguridad y su Centro Histórico que sigue abandonado.